El Gobierno argentino confirmó la continuidad del esquema de tipo de cambio especial para exportadores, conocido como dólar «blend», a pesar de las sugerencias del Fondo Monetario Internacional (FMI) para eliminarlo. Este esquema permite a los exportadores liquidar el 80% de sus divisas al tipo de cambio oficial y el 20% restante al «contado con liquidación» (CCL). Aunque el informe del FMI sugirió que este sistema podría finalizar a fin de junio, las autoridades argentinas han negado cualquier cambio inminente.
El dólar «blend» fue implementado como una medida para incentivar la liquidación de divisas por parte de los exportadores, proporcionando un tipo de cambio más favorable en comparación con el oficial. Recientemente, el informe del FMI señaló que las autoridades argentinas se comprometieron a eliminar este esquema preferencial y otros controles cambiarios distorsionantes antes de finales de 2024. Sin embargo, el ministro de Economía, Luis Caputo, desmintió estos rumores, asegurando que el dólar exportador y la devaluación mensual del 2% del tipo de cambio oficial se mantendrán sin cambios.
Reacciones Oficiales
El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y otros funcionarios del Ministerio de Economía, reiteraron el mensaje de Caputo en sus redes sociales, subrayando que no habrá modificaciones en el esquema actual. El Gobierno defendió la continuidad del dólar «blend» como parte de su estrategia económica, a pesar de la presión del FMI para desmantelar estos controles.
Discusiones sobre el Impuesto PAIS
El FMI también ha insistido en la eliminación del impuesto PAIS, una medida fiscal que el Gobierno incrementó significativamente en diciembre. La alícuota para importaciones pasó del 7.5% al 17.5%, contribuyendo notablemente al superávit fiscal del país. El Gobierno se comprometió a revertir este aumento cuando la ley Bases entre en vigencia, aunque el FMI espera una eliminación total del impuesto para finales de 2024.
Planes Futuros y Compromisos con el FMI
Además del dólar «blend» y el impuesto PAIS, el Gobierno prometió desarrollar una hoja de ruta para la eliminación gradual de los controles cambiarios, que deberá presentarse al FMI para fines de julio. Este plan incluirá un marco para una flexibilización de los controles basada en condiciones específicas y experiencias de otros países. El objetivo es facilitar una eventual unificación del tipo de cambio y mejorar la eficiencia del sistema tributario, con un borrador de propuesta esperado para octubre.
En resumen, a pesar de las presiones del FMI, el Gobierno argentino reafirma su compromiso con el esquema de dólar «blend» y mantiene su postura sobre la política cambiaria y fiscal, destacando la importancia de estos mecanismos para la estabilidad económica del país.
