En un hito histórico, el Papa Francisco en el G7 sorprendió con su perspectiva sobre la inteligencia artificial. Francisco describió la IA como «un arma de doble filo», potente pero peligrosa si no se maneja con ética y responsabilidad política. Sus palabras resonaron fuertemente entre líderes mundiales preocupados por el futuro tecnológico. Durante su estadía en la cumbre, el Papa sostuvo reuniones clave con Joe Biden, Emmanuel Macron y otros líderes globales, discutiendo desde la paz mundial hasta el impacto social de la inteligencia artificial.
La Visionaria Perspectiva del Pontífice
En un discurso cautivador, Francisco advirtió sobre los riesgos del «paradigma tecnocrático» y enfatizó la necesidad urgente de una «sana política» que guíe el desarrollo tecnológico hacia el bien común.
El Papa desafió a los líderes presentes a considerar cómo la IA puede fortalecer la dignidad humana y promover un futuro sostenible para todos, enfatizando que la ética debe prevalecer sobre el progreso tecnológico desenfrenado.
Francisco dejó claro que la inteligencia artificial debe ser un aliado en la construcción de un mundo más justo y solidario, donde los avances tecnológicos no comprometan los valores fundamentales de la humanidad.